miércoles, 17 de septiembre de 2008

NUEVO TIEMPO

Todo empezó con un sueño, un sueño que me soñaba, que nos soñaba, niñ@s, mujeres, hombres, animales, vegetales y líquenes. Todos felices en amor y armonía. Suena tópico pero se escribe atípico, sólo para rebeldes y valientes, para guerrer@s de la luz y del amor, pero también de la oscuridad y de la sombra. Porque de eso sabemos mucho las madres, debemos saber...
En el sueño que me sueña los niñ@s corren felices de un regazo a otro, los hombres como buenos jardineros riegan todo lo que ha de ser regado aunque no lo hayan sembrado ellos, y las mujeres aman a tod@s y tod@s se hacen niños otra vez en sus brazos.
Pero para llegar al lugar de ninguna parte como dice Mikel, en este primer encuentro de bebes del nuevo tiempo que hubo en Munilla tenemos que enfrentarnos a nuestra sombra, sin miedo pero con humildad, única forma de descubrir el parásito que nos implantaron. Y no miramos a barba roja para deleitarnos en él, y convertirnos en él, sino para no caer más en sus garras. En las garras de este depredador que vino de fuera, pero confundimos con nosotr@s mism@s, en esta opresión internalizada que no obstante se impuso a traves de sutiles y sofisticados métodos... barba roja no nos pertenece, pero si la oscuridad de la que se alimenta, esa oscuridad es el vacío en el que descansa la semilla de nuestro deseo de nuestro amor y de nuestra compasión. Nos hace falta, tanta falta como nos hace falta la madre y su silencio, como nos faltan los fuertes brazos que nos protegan de los depredadores para que nos podamos entregar tranquilas y plenas al arte de criar.
En este blog, punto de encuentro de nuestras trivulaciones, planes y descubrimientos, trataremos de desentrañar estas trampas, compartiremos las formas en las que nos liberamos y nos reconectamos y planearemos como organizarnos. Que quien quiera oir oiga.

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